El otro día os hablé de la red de meridianos energéticos usados por la Medicina Tradicional China como base de tratamiento. Se actúa sobre ellos para prevenir, recuperar y mantener la salud.
El otro rasgo que está siempre presente en los diagramas de meridianos del cuerpo humano son los puntos específicos marcados sobre los canales individuales.
Algunos canales tienen muchos, otros tienen menos, algunos se agrupan cerca de otros y otros aparecen más separados.
Éstos representan lo que se describe como puntos de acupuntura.
Pero, ¿cómo están relacionados con el sistema energético dinámico de meridianos?
Es en el recorrido de esos meridianos donde se encuentran los puntos en un número variable.
En muchos de los canales se encuentra lo que se podría describir mejor como “puntos de acceso”. Hablábamos en el post de los meridianos sobre una analogía entre la red energética y el cauce de un río, pues los puntos de acupuntura serían el efecto remolino que atrae todo hacia el centro del río y que en realidad lo que proporciona es el acceso a lo más hondo del río.
Se pueden considerar los puntos de acupuntura como llaves, puertas de acceso o “vórtices de energía” que atraen al Qi dentro y fuera del flujo de energía corporal y que proporcionan los puntos de acceso a través de los cuales se influye directamente en el flujo del Qi del cuerpo.
Los tsubos o puntos de acupuntura coinciden con zonas donde el sistema nervioso y el vascular se entrelazan especialmente y en ellos existe una actividad electromagnética y neurotransmisora aumentada medible de forma científica.
En resumen, cuando influimos en los meridianos y los puntos con la estimulación adecuada, podemos regular la energía y colaborar con la capacidad de autorreparación del organismo, gracias a la red energética existente que establece un sistema de comunicación mediante el cual los influjos energéticos penetran en el organismo incidiendo en los procesos biológicos.
¿Cómo activar los puntos de acupuntura?
Incluso la simple presión sobre un “vórtice de energía” específico puede llegar a provocar cambios en el sistema de energía, con los consiguientes efectos físicos, emocionales y mentales.
Las técnicas utilizadas más conocidas en terapia para este fin son:
- Digitopresión o acupresión, mediante la presión con manos y dedos. ej. Shiatsu.
- Acupuntura, con la inserción de agujas.
- Moxibustión, utilizando como herramienta los puros de moxa, emisores de calor.
- Magnetoterapia, aplicando en los puntos imanes de tamaño y fuerza variables.