Darnos un baño es una práctica realmente buena, tonifica nuestra musculatura y nos relaja, lo único malo es el gasto de agua y de dinero.
En algunos casos como depresión, agotamiento, cansancio, tensión baja, etc. es recomendable darse un baño aromático estimulante dos veces a la semana, se encontrarán más animados y con más energía.
Preparar unas sales aromáticas es muy sencilla, las podemos guardar en un bote en nuestro baño y usarlo cuando lo deseemos.
Impregnamos al bicarbonato sódico con las esencias, las guardamos en un bote y las agitamos bien. El bote es recomendable que tenga cierre hermético o de rosca.
Estas sales son estimulantes, antirreumáticas, antisépticas, tonifican la circulación, combate el agotamiento físico y el cansancio intelectual.
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