Remedios naturales para la hipotensión.

La hipotensión (tensión baja) es la disminución de la tensión arterial por debajo de los niveles normales, justamente lo contrario que la hipertensión.

Esta patología puede ser debido a diferentes motivos: causas genéticas, hormonales, debido a una insuficiencia cardíaca o renal, por ejercicio físico, un golpe de calor o una insolación, hemorragias, factores ambientales como la altitud, etc.

Si padecemos de tensión baja podemos notar síntomas como mareos o vértigos, lipotimias, cansancio y somnolencia.

Plantas medicinales

En el caso de padecer hipotensión debemos usar plantas excitantes y energetizantes como el romero, la ajedrea, la menta, el ginseng y el eleuterococo (Ginseng siberiano). Podemos buscar un extracto que contenga eleuterococo y romero, es una mezcla muy adecuada y sin las contraindicaciones o efectos secundarios que puede tener el ginseng coreano para algunas personas.

Por supuesto podemos añadir canela y salvia en nuestros platos para así ayudarnos desde nuestra dieta y si además tomamos infusiones de té verde mejor que mejor.

Geoterapia

El uso de la arcilla o geoterapia nos ayudará de manera sencilla en el caso de la tensión baja.

El método de la aplicación es poner un emplasto o cataplasma de arcilla templada (nos valdrá tanto la arcilla verde como la roja) en la zona abdominal o lumbar, lo dejaremos actuar entre 20 a 45 minutos, pasado este tiempo nos lavaremos bien con agua templada.

Si lo deseamos podemos mejorar este tratamiento con la incorporación de aceites esenciales hipertensores, la aromaterapia como siempre echando una mano, aceites como el romero, albahaca, tomillo y jengibre, usaremos entre 3 y 4 gotas en total que echaremos en la arcilla ya preparada.

Remedios naturales

Desde la visión de la oligoterapia, podremos tomar una ampolla de cobalto y otra de yodo al día, mejor si las tomamos en tomas diferentes por ej. una de ellas en ayunas y la otra entre horas.

La hidroterapia nos será muy útil sobre todo si la usamos todos los días o varias veces a la semana, hay varias técnicas adecuadas para ayudar a mejorar nuestra tensión, algunos ejemplos:

• Realizar fricciones en seco con una esponja (mejor si la esponja es de crin).
• Las fricciones también las podremos realizar con la esponja mojada en agua fría.
• Podemos ponernos una compresa de algodón o lino mojada en agua fría en el abdomen.
• Las envolturas también son recomendadas (usaremos un paño grande mojado que nos tapará todo el tronco).
• Andar descalzo sobre agua fría y sobre el rocío.
• Aplicar chorros de agua fría o alternar agua fría y caliente en brazos, piernas y cabeza (sobre todo si la notamos congestionada).